martes, 25 de marzo de 2008

41



La conozco hace mas de 20 años y nunca ha dejado de tener esa sonrisa pícara; niña permanente si su anciana conciencia le dejara, siempre a punto de jugar hasta que recuerda que las reglas no se pueden romper, yo no pierdo la esperanza de que un día recuerde que también se hicieron para saltarlas.
Acaba de cumplir 41, como podéis ver en la tarta (exquisita por cierto), y le deseo que cumpla muchos más aunque no dejaré de insistir en la sentencia de Horacio “Carpe Diem” ya que cuando menos te lo esperas se acabo el tiempo de juego y te encuentras en el vestuario del camposanto contándole a los gusanos el regate que no hiciste.
Para ser honrado diré que todo lo escrito son mis sensaciones y que, a lo mejor, lo único que sucede es que intento imponer mi visión de la vida a alguien que tiene la suya propia, sencilla, escueta, reglada, pero que no tiene por ello que ser menos feliz que la mía.
Al margen de toda esta filosofía sobre las distintas formas de afrontar nuestros días (perdona que siempre quiera aleccionarte pero eres la víctima perfecta) sabes que te aprecio y por ello, tal y como te dije, pongo tu tarta en mi blog; brindo por tus 41 tan bien llevados y ahí te dejo esta musiquita que siempre consigue que te recuerde.
Whigfield: “Saturday Nigth”


1 comentario:

Anónimo dijo...

Me sumo a la felicitacion a Charo y que en los proximos 41 siguientes no se quede sin tiempo de juego aun sin saltar las reglas del juego.
FELICIDADES!!!